Los investigadores han observado que en este periodo histórico han ocurrido acontecimientos muy particulares. Además de las transformaciones tales como la Segunda Revolución Industrial y la formación de Estados nacionales, se ha podido llegar a la conclusión de que la cultura se concretó y tuvo una transformación de aquella vida industrial que en un primer momento tuvo límites, hasta convertirse en una sociedad de masas, super-industrializada, globalizada, cambios que se observan en lo material, en la vida cotidiana y en la cultura.
¿Qué tipo de cultura hubo en este periodo? Planteamos que los cambios culturales se caracterizaron por tener una base burguesa, esto quiere decir que esa clase social y su forma de vida está íntimamente relacionada con la sociedad de masas que se comenzó a gestar, caracterizada por el aumento poblacional; la cultura y la vida se hizo muy parecida en distintas partes del mundo, sobre todo, en las ciudades aburguesadas de carácter consumista. La forma de vida burguesa incluía espacios de reunión, como lo fue el Café Royal de Londres, en donde podían hacer alarde de su nivel económico y su elegante vestimenta, de su consumo de té o bebidas alcohólicas como el whisky.
El Café Royal de Londres de William Orpen es un retrato del mismo pintor (ubicado en el lado izquierdo de la obra) y sus amigos; la rigidez de la escena se ha suavizado con algunas figuras que charlan sobre las mesas. Orpen fue uno de los retratistas más apreciados por la alta sociedad de su época y debió su éxito a su estilo seguro y preciso, que captaba a la perfección el estilo de la sociedad burguesa.
En el desarrollo cultural podemos advertir el paso de un tipo de cultura con base en un desarrollo económico de mediano alcance hacia otro tipo de cultura, ya con base en los adelantos científicos y tecnológicos producto de la Segunda Revolución Industrial. Debido al desarrollo material, traducido en lo tecnológico y frente al crecimiento abrupto de la riqueza causado por sometimiento económico de otros continentes, la cultura burguesa adoptó nuevas formas, relacionadas justamente al desarrollo material y económico. Una característica principal fue que se masificó la sociedad y con ella el consumo de la producción capitalista.
En la siguiente imagen se muestra otro espacio común de la época, en donde se observa una forma de entretenimiento, a la par de la masificación de los eventos. “Es prácticamente imposible no escuchar los gritos de la multitud o no percibir el olor de humo de los cigarros y el sudor del boxeador que emanan de este cuadro. El púgil, captado en los escasos momentos que trascurren entre dos asaltos, es el foco de la obra. A menudo se servía de competiciones deportivas como el boxeo y el remo para captar el desnudo en movimiento.” (Beard, L., et al., 2012, p. 170).
Thomas Eakins. Entre asaltos. 1899.
Surgió una clase media que seguía los pasos de la clase alta ya existente, tenían las posibilidades para buscar y consumir muebles, viviendas, periódicos, etc., así, estos grupos sociales vivieron con comodidad debido a su buen nivel económico. Las actividades relacionadas con la cultura o el entretenimiento se fueron diversificando, se crearon operetas cortas, música que buscaba llegar a un mayor número de personas, además, se construyeron nuevos teatros. En Alemania, por ejemplo, de 200 teatros que había se pasó a un número de 600 a finales del siglo XIX.
La Ópera Estatal de Praga fue construida en el año 1885 en el mismo lugar que ocupaba el Teatro de la Ciudad Nueva. En sus inicios se llamó Nuevo Teatro Alemán, nombre que se mantuvo hasta 1945 cuando se adoptó la denominación actual.
Músicos alemanes como Strauss y Wagner consolidaron piezas que agradaron al público. Incluso socialistas como Adler y Shaw consideraron que la música de Wagner tenía un trasfondo socialista, debido a que las visiones y filosofías relacionadas con lo colectivo se volvieron parte del ambiente social ya muy común en ese entonces. Por supuesto que entre artistas y músicos fue muy frecuente la adopción de alguna filosofía; en el caso de Wagner, propuso otras formas de composición musical. En Gran Bretaña se creó el Music Hall, uno de los teatros más importantes y característicos debido a la relación que tiene con la masificación del arte.
A continuación puedes escuchar piezas de Strauss y Wagner:
Surgieron otras formas de cultura musical y de entretenimiento, los cabarets se conformaron como lugares visitados normalmente por las clases medias o turistas. Así, surgió el ballet de Carusso, llamado así en honor al gran compositor de este tipo de obras; el tango en las tabernas de Argentina y la canzone (canción) napolitana (Nápoles, Italia) de carácter popular. En España tomó fuerza la música flamenca andaluz, de corte intelectual, debido a que la gente instruida en las Universidades, gente educada, era la que gustaba de la misma.
El tango es un género musical y una danza, característica de la región del Río de la Plata y su zona de influencia, principalmente de las ciudades de Buenos Aires, en Argentina, y Montevideo, en Uruguay. Nacido a fines del siglo XIX de la fusión cultural de las comunidades afro-rioplatenses, con la cultura gauchesca, indígena, hispana, italiana y la enorme diversidad étnica de la gran ola inmigratoria llegada principalmente de Europa y el Oriente medio, se convirtió en un género de naturaleza global a partir de la segunda década del siglo XX. Desde entonces se ha mantenido como uno de los géneros musicales internacionales más potentes del mundo.
La segunda mitad del siglo XIX fue un periodo de gran prosperidad, sin embargo, artistas y escritores se sentían insatisfechos ante las demandas del público que en el caso de la arquitectura, se limitaba a mezclar estilos sin sentido a tal punto que daba la impresión de que se erigían estructuras a las que luego solo se les añadían adornos tomados de algunos patrones clásicos (Gombrich, 2007). Entonces en Inglaterra algunos artistas y críticos de arte como John Ruskin y Willian Morris reaccionaron ante esta decadencia producto de la Revolución Industrial y la producción en masa, y propusieron recuperar el valor de los oficios y el trabajo manual. En este contexto surge el art nuveau (arte nuevo) en la década de 1890, más libre y moderno, en la que los arquitectos como el belga Victor Horta probaron nuevos tipos de decoración inspirada en la belleza orgánica de la naturaleza, estos autores también experimentaron con nuevos materiales como el hierro y el cristal, un ejemplo es la casa Horta en Bruselas.
Casa Horta - rue Neuve. Bruselas (1901)
Por otro lado, la invención del cinematógrafo y su consecuencia, la elaboración de películas, propició su masificación y se convirtieron en un entretenimiento popular. En Francia, Charles Pathé emergía como cineasta, después, en otras latitudes, Metro Goldwyn Meyer, Warner Brothers y Fox. Al mismo tiempo surgieron pequeñas salas de cine que llamaron nickelodeons, muy populares entre las personas de clase media. En Estados Unidos, a finales del siglo XIX, 26 millones de personas frecuentaban el cine, dato que hace evidente la masificación de este arte y negocio al mismo tiempo.
En otros ámbitos artísticos hubo una tendencia de buscar otras formas de representación; en la pintura, los autorretratos ya no eran tan recurridos, ya no fue lo más común encontrar obras realistas de arte. En lugar de eso se buscaron maneras abstractas de representación, tales como el cubismo. Por ejemplo, con la obra de Pablo Picasso, según los estudiosos, se ha planteado que además de la calidad técnica su obra ha gustado entre grandes grupos de personas por el simple hecho de que cuando el público observa la obra se admira, le causa algún efecto.
Cubismo
Este cubismo representa objetos reales, “aplanados” sobre el lienzo, de modo que distintos lados de cada figura puedan mostrarse simultáneamente. En vez de crear la ilusión de un objeto en el espacio, el cubismo define al objeto en las dos dimensiones del lienzo.
En la búsqueda de hacer representaciones a través de figuras geométricas una vez habiendo experimentado en sus obras de naturaleza muerta, ya con estos tintes abstractos, dilucidó su obra “Instrumentos musicales sobre una mesa”. “Entre 1912 y 1913, Picasso inventa un nuevo y simple vocabulario pictórico. Los signos de instrumentos y cabezas se intercambian ahora con tal facilidad que se puede apreciar claramente que las cabezas se encuentran en pleno proceso de convertirse en instrumentos musicales o de dejar de serlo”.
Fauvismo
Mientras tanto, los futuristas italianos tendieron a simpatizar con posturas políticas conservadoras conocidas como políticas de “derecha”, así, esta misma corriente artística buscó representar cosas que fueran producto de la industrialización. Otro tipo de artistas comenzaron a pintar desconcertantes e ilógicas escenas, creando extrañas criaturas a través de objetos cotidianos, tal fue el caso del “fauvismo”. Uno de sus representantes fue Chagall, pintor prolífico de origen ruso quien manejó un estilo complejo e infantil; muchas de sus imágenes están enraizadas en el folklore judío. Una de sus obras importantes fue “Sobre la ciudad” en la que “Sobre una ciudad formada por sencillas casas y cobertizos de madera, dos figuras fantásticas vuelan por el cielo. La mano del hombre se apoya suavemente en el pecho de la mujer, parecen amantes, quizá fugándose. La pintoresca ciudad, pintada con bloques de color, con su bonita empalizada de madera y sus tonos cálidos demuestra el interés de Chagall por los cuentos populares y la fantasía” (Beard, L., et al., 2012: 110).
Marc Chagall. Sobre la ciudad. 1915.
Simbolismo
Otro grupo fue el de los simbolistas, quienes rechazaban el realismo, al creer que la pintura debía transmitir ideas y estados mentales en vez de simplemente describir el mundo. Sus temas fueron de tono religioso o mitológico, así como el erotismo, la muerte y el pecado. Los expresionistas daban fuerza al color, buscaron formas pictóricas que evidenciaran sus sentimientos más íntimos en vez de representar el mundo externo, de tal forma que fuera intensa, apasionada y muy personal. Se basó en el concepto de que el lienzo es un vehículo para mostrar las emociones; sus colores irreales y dramáticas pinceladas hacen que la pintura expresionista típica muestre vitalidad. Algunos pintores dieron más importancia a los colores base que a la imagen representada. Kirchner fue uno de sus exponentes, en su obra “Autorretrato con modelo”, mediante gruesas pinceladas y colores que chocan violentamente, crea una sensación de desesperada energía, “el cuadro parece demasiado pequeño para contener la escena, por lo que sugiere una impresión de expansión, como si los colores se estirasen en los bordes. Esta obra es característica del colorido sensual y radiante, la dramática intensidad y angulosos del expresionismo” (Beard, L., et al., 2012: 295).
Ernst Ludwig Kirchner. Autorretrato con modelo. 1910.
Impresionismo
Un sentimiento de insatisfacción se extendió también a la pintura en la que numerosos autores desafiaron la normas del arte académico explorando nuevas formas de expresión, y como los arquitectos, también pusieron sus ojos en la naturaleza y buscaron representarla tal y como la veían. Así surgieron nuevas corrientes pictóricas denominadas modernas entre las que se encuentran:
Los pintores impresionistas buscaron representar la naturaleza a partir de la exploración de la luz y los colores puros y brillantes, con pinceladas sueltas y contornos precisos, rodeados de estos espacios, un ejemplo de esto son las obras del pintor francés Paul Cézzane (1839-1906) y del holandés Vincent Van Gogh (1853-1890); estos autores no se preocupaban por la representación fotográfica de la realidad sino mas bien por expresar lo que sentían al pintarla. El estilo impresionista fue mal recibido por los críticos de arte pero su postura rebelde y expresiva fue el comienzo de una verdadera revolución artística.
A finales del siglo XIX se desarrollan el realismo y el naturalismo:
Realismo
En una época definida principalmente por el crecimiento de la industria, la ciencia y la participación de las masas obreras. Los autores reflejan ambientes y personajes de su época sobre todo los urbanos. El escritor intenta describir en su obra la realidad de manera exacta y objetiva en la que los personajes y argumentos reflejan la cotidianidad de personas comunes con un estilo sencillo y sobrio sin complicaciones formales.
La novela es el género preferido para describir la realidad social a través de sus historias. Autores como Thomas Mann, Emma Goldman y Máximo Gorki forman parte de esta corriente literaria
Naturalismo
El naturalismo se desarrolla a partir una corriente desarrollada en Francia a partir de las novelas de Emile Zolá (1840-1902) que se caracterizó porque en la descripción de sus historias y personajes se busca cierta exactitud científica a partir de la documentación de ambientes y fechas, y la comprobación de datos que el autor detalla apoyándose en disciplinas científicas como la psicología y la medicina. Autores Benito Pérez Galdós (España, 1843-1920) y Oscar Wilde (Irlanda, 1854-1900) son representantes de esta época.