Modos de producción

“La especie humana es resultado de procesos naturales; al mismo tiempo, la especie es social por naturaleza”

Eric Wolf, Europa y la gente sin historia (1982:97).

Con la teoría de los modos de producción el filósofo alemán Carlos Marx quiso explicar el desarrollo de la humanidad a partir de la evolución social del trabajo desde sus origenes hasta la época (s. XIX) en la que vivió.

Para comprender las bases de nuestra existencia Carlos Marx parte de la idea que la especie humana forma biológicamente parte de la naturaleza pero que su actividad social, su interrelacion e interacción con otros, que hace que la especie adquiere cultura y se hace verdaderamente humana. La actividad social más importante es el trabajo, mediante la cual la humanidad adapta y transforma la naturaleza haciendo uso colaborativo de su fuerza física y mental.

A través de los distintos tiempos y espacios, el proceso de trabajo se organizó de distintas formas y surgieron actividades, formas de explotación y relaciones sociales específicas. Carlos Marx adoptó el concepto de producción para describir una compleja red de relaciones dependientes entre naturaleza, trabajo y organización social.

El proceso de producción se organiza de difentes formas o modos en un contexto histórico; por ello, Marx distinguió algunos modos de producción: entre otros, el modo de producción de la comunidad primitiva, el esclavista de la antigüedad europea; el modo feudal de la edad media europea; un modo asiático de los imperios chinos y mexica; un modo capitalista desde la revolución industrial; un modo de producción socialista y un modo de producción comunista.

El antropólogo estadounidense Eric Wolf señala que la utilidad del concepto de modo de producción radica “en su capacidad para destacar las relaciones estratégicas que intervienen en el despliegue del trabajo social” por parte de las sociedades humanas y no como una clasificación que busca simplificar la complejidad histórica de cada sociedad (Eric Wolf, 1994: 100-101).

Detalle de ilustración del mes de septiembre, las muy ricas horas del Duque de Berry, Francia siglo XV

Detalle de ilustración del mes de septiembre, las muy ricas horas del Duque de Berry, Francia siglo XV

Feudalismo

Feudalismo

Herramientas de la prehistoria
Herramientas de la prehistoria

El ser humano o Homo Sapiens Sapiens es producto de una larga evolución; en este proceso su habilidad de manejar herramientas y utensilios fueron claves para dominar su naturaleza y transformar a su entorno. Para Carlos Marx el elemento central de la hominización fue el trabajo, que permitió al ser humano ampliar sus horizontes: cultivar, construir, cazar, dominar, etc. Esta especialización permite un progreso que ya no depende únicamente de la naturaleza pero también de la especie humana misma, especialmente en convivencia con los demás.

Para satisfacer sus necesidades aparecen nuevas actividades, nuevos deseos y anhelos “propias de la convivencia social que, al provocar la búsqueda de formas concretas para su satisfacción, condicionan un avance constante” (Juan Brom, 2001: 72). El hombre aún no produce, caza y recolecta principalmente, pero a diferencia de los animales elabora, utiliza y guarda sus herramientas para desarrollar acciones proyectadas al futuro.

De acuerdo con el diccionario de economía política: “la debilidad del hombre aislado y la imposibilidad de producir y luchar con la naturaleza individualmente requerían que la propiedad sobre los medios de producción y el trabajo fuesen colectivos. La cooperación simple de los hombres primitivos aparecía como una nueva fuerza productiva. El trabajo del hombre no creaba excedentes por encima del mínimo vital necesario, la distribución de los productos era igualitaria. En consecuencia, no se daban ni la desigualdad de bienes, ni las clases ni la explotación del hombre por el hombre, no había Estado”.

Con la aparición de la agricultura y de la ganadería se establecen nuevos esquemas de explotación y surgen las primeras desigualdades institucionalizadas. Marx le ha llamado “modo de producción asiático” al tipo de organización social en el que surge una casta de privilegiados que explotan a un grupo de campesinos y trabajadores mediante la extracción de excedentes, productos de su trabajo que se encuentra fuertemente vinculado con el cultivo de la tierra y la realización de grandes obras públicas.

A veces se le ha llamado a este el “despotismo tributario”, “civilizaciones hidraúlicas” o “civilizaciones de los ríos” haciendo referencia a la organización egipcia, mesopotámica, mexica y china. En estas un aparato estatal gobernaba de manera despótica sobre la población, sin que a esta última se le privara de la tierra y los medios de producción. Las comunidades entregaban, colectivamente una cantidad de bienes o de trabajo social a las élites locales, en un sistema de explotación que no está basado en la propiedad.

Interpretación de la antigua Sumeria
Interpretación de la antigua Sumeria
Mosaico romano de Dougga Túnez, que representa la esclavitud en el Imperio Romano
Mosaico romano de Dougga Túnez, que representa la esclavitud en el Imperio Romano

De acuerdo con el diccionario de economía política este fue el primer modo de producción que se basa en la explotación que surge a raíz del proceso civilizatorio. Carlos Marx utilizó el concepto para caracterizar particularmente al Imperio Romano y, en menor medida, a la Grecia clásica. En este modo las relaciones de producción se basaron en la propiedad de esclavos y el dominio sobre los medios de producción por parte de los esclavistas. Los esclavos se obtenían principalmente por medio de la guerra y la conquista para luego emplearlos en los grandes latifundios agrícolas. Siendo dueños de la vida de sus esclavos, la élite obtenía un plusproducto además de la posibilidad de dedicarse a tareas distintas del trabajo físico, mismo que aprovechaban para ingresar en la carrera política y el comercio.

Con base en este régimen el imperio romano pudo expandirse durante siglos pero con el tiempo se convirtió en un freno. El sistema era cruel y el sistema dejó de funcionar cuando el Imperio Romano se estancó; mismo que facilitó las sublevaciones y el final hundimiento de la esclavitud en el contexto de las invasiones de los pueblos germánicos o bárbaros.

El modo de producción feudal se basa en la explotación de la tierra y la propiedad parcial sobre los campesinos siervos por parte de los señores feudales. El feudalismo surgió en Europa occidental durante la Edad Media como resultado de la descomposición del Estado romano y como resultado de la organización social de los pueblos germánicos. El feudalismo tuvo, de acuerdo con Lenin, como rasgos fundamentales: (1) una economía rural, (2) el pago de tributo del campesino al señor, (3) la concesión de los medios de producción y de la tierra por parte del señor al campesino y (4) el desarrollo tecnológico limitado.

“La propiedad sobre la tierra era la base para obtener trabajo o productos no remunerados. El trabajo adicional no remunerado del productor directo (campesino siervo) o el producto obtenido mediante dicho trabajo y del que se apropian los dueños de la tierra por medio de la coerción extraeconómica se llama renta feudal del suelo.“*

*Diccionario Marxista de Economía Política. (1980). México: Ediciones de Cultura Popular.

Merienda en una cacería
Merienda en una cacería

Del manuscrito de Gaston Phébus, "Libro de la caza". Fabricado en París, alrededor de 1408-1410. Referencia: GOUSSET (M.-Th.), "Iluminaciones. La vida en la Edad Media", coll. Recuerdos y maravillas de la biblioteca.

En el régimen feudal existía dos clases principales: los señores feudales y los siervos. Entre los señores destacan los integrantes de la Iglesia católica, que operaba como terrateniente y que ejercía una gran influencia cultural. El régimen feudal se descompuso gradualmente por la dinámica del comercio capitalista burgués, la expansión geográfica europea y las crisis (guerras, hambrunas, catástrofes, levantamientos…) de los siglos XIV-XV.

Coalbrookdale de noche, Philipp Jakob Loutherbourg (1801)
Coalbrookdale de noche, Philipp Jakob Loutherbourg (1801)

El modo de producción que Marx analizó principalmente fue el sistema capitalista. De acuerdo con él, éste nace cuando el dinero permitió comprar la fuerza de trabajo. El hecho que el trabajador se convierte en una mercancía solamente se puede en determinado contexto cuando se rompe el lazo entre los productores y los medios de producción, que son propiedad de los que tienen la riqueza (en este caso los capitalistas). Los productores se convierten en meros operadores de los medios de producción y reciben a cambio un salario para su trabajo. En el modo de producción capitalista es esencial que en el curso de una jornada de trabajo los obreros producen más que el costo de su renumeración, este excedente pertenece al capitalista. A mayor excedente, mayor ganancia y crecimiento del capital que se reinvierte en nuevos ciclos de producción.

De acuerdo con Eric Wolf “el modo capitalista tiene tres características entrelazadas: los capitalistas tienen el control de los medios de producción; segundo, a los trabajadores se les niega el acceso independiente a los medios de producción y deben vender su fuerza de trabajo a los capitalistas; y tercera, la maximización de los excedentes producidos por los trabajadores con los medios de producción de los capitalistas trae consigo acumulación incesante a la cual acompañan cambios en los métodos de producción” (Eric Wolf: 1994: 103).