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El argumento: en un trabajo siempre debe
haber una idea central, que exprese de qué trata lo que se está
exponiendo, que se
sustenta en la forma de organizar y ensamblar sus estructuras específicas; estas
estructuras pueden ser datos, conclusiones de otros autores y/o razonamientos de
quien escribe; que en conjunto establecen lo que se conoce como una línea
argumentativa, la cual documenta el contenido del trabajo, y que le permitirá al
lector-espectador llegar a comprender y evaluar la idea central, como sustento del
argumento. Constituye lo más importante en el proceso de dar forma a una tarea.
Para su desarrollo se requiere que:
El trabajo muestre un propósito que conduzca
al lector-espectador durante su lectura
Exista una idea central definida
Se ejemplifique, al menos, un caso
específico
Se construya el trabajo, conduciendo en
forma lógica las ideas contenidas en él
Se organicen las ideas de forma clara para
el lector-espectador del trabajo
Al elaborar el argumento: se debe pensar desde el punto de vista del
lector-espectador. Quien elabora el trabajo se debe anticipar a las posibles
preguntas de su auditorio, o a su solicitud o exigencia de mayor información. Al
construir el argumento se debe redactar de tal forma, que la idea central resulte
comprensible; para ello, es necesario dar respuesta al título del trabajo,
teniendo en mente las siguientes preguntas:
¿Qué se desea que piense el lector-espectador al finalizar la lectura
o exposición?
Cómo autor ¿Qué posición sostienes o
defiendes en el trabajo?
Notas para el alumno: recuerda que el profesor que indicó la tarea,
tiene las siguientes ideas generales en mente:
a). Analizar significa determinar la naturaleza
de algo, y las relaciones entre los elementos que lo integran
b). Comparar y contrastar significa discutir las
similitudes y diferencias entre dos cosas o conjuntos de ideas, y presentar los
resultados encontrados en forma clara y sencilla
c). Describir significa ilustrar algo en
palabras, y resumir en forma clara sus principales características
d). Discutir significa hacer
observaciones acerca de algo, utilizando la información o los hechos, razonando y
argumentando; para presentarlo, con algún detalle, en forma clara y concreta
e). Evaluar significa examinar o juzgar
el significado, valor o las condiciones de algo; para determinar su valor
f). Explicar significa especificar y/o
deslindar algo en forma simple e inteligible; el dar razones para ello o sus
causas; el mostrar el desarrollo lógico y sus relaciones
Redacción-elaboración del Trabajo: para iniciar su redacción se sugiere que el
alumno se haga las siguientes preguntas:
¿De qué me voy a ocupar en mi trabajo?
¿Deseo que mi trabajo sea descriptivo o
persuasivo?
¿A qué clase de lector me dirijo?
¿Cuáles son los puntos más importantes?
¿Cuál será mi línea de desarrollo principal,
sobre la cual desarrollaré mi argumento?
¿Qué temas desarrollaré para fundamentar mi
argumento?
¿Eso me llevará a la conclusión a la que me
interesa arribar?
¿Cuáles son las consecuencias que se
infieren de lo escrito?
Al terminar de contestar se procede a leer lo
que se ha escrito, y se debe meditar sobre la forma en que se desea abordar la
redacción-elaboración del escrito, y se procede a elaborarlo.
Observaciones:
1. No se deben utilizar pronombres personales
en la redacción [yo creo; el pensaba (¿quién es él?); ellos consideraron
(¿quiénes son ellos?), etcétera]
2. En caso de comparar cosas o situaciones,
puede reducirse el análisis a únicamente dos opciones que son contrastadas
3. Al final de la conclusión final se debe
incorporar la lista de referencias consultadas
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