El trabajo en las fábricas

El trabajo en las fábricas

La relación entre el obrero y el patrón se estableció a través del salario. El vínculo era posible porque el burgués era el dueño de los medios de producción, las máquinas y los instrumentos de trabajo, mientras que el obrero no tenía más que su fuerza de trabajo. El obrero se presentaba a la fábrica y solicitaba al patrón un empleo, es decir, vendía su fuerza de trabajo, se contrataba para trabajar en la fábrica por un determinado tiempo y a cambio de ese tiempo el patrón le pagaba un salario. Los patrones establecían el salario que siempre era tan bajo que apenas alcanzaba para mal comer. Generalmente la jornada se extendía más allá del tiempo que se había acordado.

La explotación fabril se extendió a otros sectores de la población: al lado de los hombres trabajaban mujeres y niños a quienes se les sometía a los mismos niveles de explotación pero recibían una paga menor.

El contingente infantil estaba integrado fundamentalmente por niños huérfanos. La orfandad era un fenómeno común en esa época, dado que la pobreza y los problemas de salud hacían perecer a los padres, pero también muchos niños eran abandonados por considerarse una carga.

Breaker boys, Lewis Hine (detalle)

 

Los resultados de la explotación fabril comenzaron a salir a la luz pública. La miseria de los barrios obreros, el abandono familiar debido a que las mujeres también laboraban en la fábrica, y particularmente el trabajo infantil, fueron objeto de rechazo de ciertos sectores de la sociedad. En las filas de los que criticaban esta situación estaban los que se preocupaban por el sufrimiento humano y, por otra parte,  aquellos a quienes les horrorizaba la pobreza porque la sentían como una amenaza al modo de vida burgués y responsabilizaban a los pobres de su propia situación.

Debido a la presión social se tuvo que atender la situación de pobreza por lo que, en 1834, se creó en Inglaterra la Nueva Ley de Pobres La ley fue rechazada por los liberales, pues según su punto de vista, la protección a los pobres dañaba a la economía. Se argumentaba que el dinero  usado provenía de los impuestos cobrados a los burgueses con lo que se desviaban recursos que podían ser invertidos en la producción. Además, consideraban que dar dinero a los pobres estimulaba la flojera y la ociosidad y alejaba a la fuerza de trabajo de las fábricas. No obstante las objeciones, la ley fue aprobada pero con la modalidad de que los necesitados ingresaran a las workhouse, casas de trabajo, en donde recibirían techo, comida y la enseñanza de un oficio a cambio de la realización de algún trabajo.

Niños en una casa de trabajo

La mayor parte de las veces, estos lugares eran más parecidos a casas de castigo y en muchas ocasiones fueron proveedoras de fuerza de trabajo infantil para que laboraran en las fábricas textiles, so pretexto de que estaban aprendiendo el oficio permanecían en la fábrica varios años

 

Te invitamos a que practiques lo aprendido realizando el Ejercicio 1.

 

Casa de trabajo (workhouse) en Ripon, Inglaterra

Alumno: