La mirada sociológica hacia la alimentación: Los Estudiantes del turno matutino del CCH Vallejo


Introducción a la Sociología de la Alimentación

Sergio Delgadillo Gayosso
José Luis Barragán Martínez
Sonia Lizbeth Torres Navarro
Eduardo Juárez Negrón



 Podríamos considerar a la alimentación como objeto de estudio por parte de la Sociología, ya que, para cubrir esta necesidad, todas las personas deben de establecer unas relaciones con el medio humano, físico y escolar que las rodea; porque los individuos construyen representaciones sociales tanto en la alimentación como en los alimentos. También porque el acto de alimentarse conduce a una serie de hábitos sociales determinados; así como en la manera en que la alimentación refleja las desigualdades sociales.
 
Cristóbal Gómez Benito. D. (2008). Aproximación a la sociología de la alimentación. (Un mapa temático) Departamento de Sociología II (Estructura Social). UNED. Pp-18. Recuperado de http://www.magrama.gob.es/ministerio/pags/biblioteca/revistas/pdf_DYC/DYC_2008_97_18_27.pdf
 
 Esta especialidad ha tratado de responder a tres preguntas: ¿qué comemos?, ¿por qué lo comemos?, y ¿cómo lo comemos? Los títulos ya revelan un primer campo: la comida, los alimentos y el hecho de comer, la dieta, la nutrición y la cultura. McIntosh señala que desde los años ochenta del siglo XX, el despertar del interés de los sociólogos por hacer una sociología de la alimentación ha ido paralelo de un interés hacia estos temas desde otras disciplinas.
 
Cristóbal Gómez Benito. D. (2008). Aproximación a la sociología de la alimentación. (Un mapa temático) Departamento de Sociología II (Estructura Social). UNED. Pp.19-21. Recuperado de http://www.magrama.gob.es/ministerio/pags/biblioteca/revistas/pdf_DYC/DYC_2008_97_18_27.pdf
 
Es por eso que con la Sociología de la Alimentación se puede saber cómo afecta el acto de alimentarse en un entorno educativo como el CCH Vallejo. Nos enfocamos en el turno matutino, ya que es donde se constata más esta problemática: hay que exponer la situación que afrontan los jóvenes estudiantes que tienen que levantarse muy temprano, salir de madrugada de sus casas, y emprender desplazamientos hasta el plantel que en muchos casos llegan a ser de más de dos horas, para llegar alrededor de las siete de la mañana al inicio de sus clases, que abarcan normalmente una jornada escolar de seis horas continuas, tras lo cual emprenden el regreso a casa. En resolución, es una rutina que abarca un espacio de tiempo de hasta más de diez horas, en lo cual, no tienen un horario determinado y reservado para tomar alimentos, si ya no es que tienen que encontrar los huecos o superposiciones para probar bocado, en las condiciones y limitaciones que el medio ambiente les ofrece para realizarlo.




Alimentación saludable
 
La alimentación es un factor importante en las actividades a desempeñar por los estudiantes; las necesidades de nutrición de los mismos son diferentes de las de otros sectores de población porque están en pleno desarrollo físico y psíquico, y en especial por el desgaste del aprendizaje que se realiza por su función en la escuela, en clase y extraclase.
 
El plato del bien comer es una herramienta útil para comprender la influencia de los alimentos: está basado en un proceso de investigación en el cual se consideraron tanto los aspectos técnicos como la percepción y la aceptación de la población. También va dirigido a los jóvenes estudiantes que están en desarrollo.
 
El plato del bien comer presenta tres grupos de alimentos:
1) Verduras y frutas.
 2) Cereales
 3) Leguminosas y alimentos de origen animal.
 
Sámaro, R, Luz, M y Casanueva, E (2008). ¿Estás comiendo bien? ¿Cómo ves?
Recuperado de: http://www.comoves.unam.mx/numeros/articulo/110/estas-comiendo-bien
 
Las necesidades nutritivas de los jóvenes, en especial de los estudiantes, van variando dependiendo del ritmo del crecimiento individual, cultural, creativo, de aprendizaje, del grado de maduración de cada organismo, de la actividad física y de la capacidad para utilizar los nutrientes de la ingesta diaria. Como la adolescencia es una etapa sensible a cualquier carencia o desequilibrio, debemos elaborar un perfil nutrimental de un joven estudiante sano que cumple con todas sus responsabilidades diarias que implica ir a la escuela, de acuerdo con las recomendaciones diarias de nutrientes para los estudiantes. Según estudio del Instituto de Nutrición, para un joven estudiante de 14 a 18 años, con un peso promedio de 59.8 Kg. y una estatura promedio de 1.60 mts., los requerimientos son: 60% de la energía alimenticia que provenga de carbohidratos, 20 a 25% de las proteínas, 15 a 20% de los lípidos, 1 % de vitaminas y minerales, y de 2.5 a 3 litros de agua.
 
Datos proporcionados por: Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD) de Sonora y la Universidad Autónoma de Nuevo León. Dr. Camou, P (2012) Dieta y Valor Nutritivo de los Alimentos. Recuperado de: http://www.ciad.mx/archivos/revista-eletronica/RES41/EliasAlvarado.pdf
 
Es recomendable consumir lo menos posible de grasas, aceites, azúcar y sal. Si observas, El plato del bien comer no incluye estos alimentos ya que están presentes de manera natural en otros alimentos y no es necesario agregarlos a nuestra dieta.
 
En vista de estos lineamientos que sirven para tener un mejor rendimiento de aprendizaje en la escuela, podemos decir que los alumnos del plantel en especial del turno matutino se hallan en una situación preocupante, no se pueden proveer de dicha alimentación debido al traslado a la escuela, esto provoca que no ingieran alimentos sólidos antes de ir a la escuela por la falta de tiempo, tienen que comer entre clases y el tiempo que tienen para poder hacerlo es muy poco. Los alimentos que compran no son siempre saludables, pues contienen grasas o azúcares, componentes que consumidos en exceso causan que la eficacia de los alumnos en el aprendizaje sea insuficiente, se distraigan con facilidad y no rindan un máximo en la escuela.
 
 Las opciones de alimentación en el plantel son las siguientes:
Cafetería Cibarium.
Puesto exterior de tamales y atoles.
Puesto exterior de comida en una camioneta.
Puesto exterior donde se vende jugos.



 
 
Sondeo y Gráficas

El sondeo se aplicó a todos los alumnos de tres grupos del Colegio de Ciencias y Humanidades plantel Vallejo, del turno matutino en la materia de Ciencias Políticas y Sociales, en los grupos: 502, 503 y 504, con exactitud, a 64 alumnos Para determinar la objetividad en base a la Sociología de la Alimentación y el tiempo de recorrido a la escuela, así como analizar si comen alimentos sólidos o no antes de llegar al plantel, llevamos un control de datos con el sondeo y sus gráficas. Lo aplicamos en el horario de clase de esos grupos, del 5 al 9 de octubre del 2015. El sondeo fue aplicado por los mismos autores de este texto, con el asesoramiento del profesor Héctor Vargas Zermeño.
 
 
1° ¿A qué hora regularmente te levantas para venir al plantel?





 
 
 
 



2° ¿Tomas alimentos sólidos en tu casa antes de salir al plantel?


 
 
 
 
 
 
 
 
 


Resultados globales, interpretación del sondeo y conclusiones
 
 
1° ¿A qué hora regularmente te levantas para venir al plantel?


 

 
 2° ¿Tomas alimentos sólidos en tu casa antes de salir al plantel?


 

 


 
 Análisis de resultados del sondeo
 
En la primera pregunta: ¿A qué hora regularmente te levantas para venir al plantel?, primer dato: la mayoría, poco más de la mitad de los alumnos del turno matutino se levantan entre 4 y 5 de la mañana (tal vez, algunos, antes). Y salir con alrededor de dos horas de anticipación para el inicio de clases. Esto es, un horario poco propicio para la ingestión de alimentos. A ello se suma la presión de no llegar tarde al plantel y las dificultades del desplazamiento y el transporte. Mientras que entre 5 y 5:30, y entre 5:30 y 6, se levantan alrededor de una cuarta parte cada uno de esos rangos, de los alumnos encuestados. La preocupación es aquella mayoría de alumnos que sufren de mayor desgaste orgánico por salir más temprano y regresar más tarde a su casa, ante la necesidad de la alimentación.
 
En la segunda pregunta: ¿Tomas alimentos sólidos en tu casa antes de salir al plantel?: el 58% de los alumnos no ingiere alimentos sólidos y el 42% restante de los alumnos sí lo hace. Los resultados del sondeo arrojan cifras muy alarmantes, ya que la mayoría de compañeros en nuestro colegio se levantan en un horario muy crítico, alrededor de las 4:00 a 5:00 de la mañana, son 3 horas antes del comienzo de las clases, y aún peor salen y hacen el camino sin alimentos sólidos consumidos previamente, ¿a qué hora comen algo los estudiantes? Esa es la pregunta que debemos de hacernos, pues llegando a clases el siguiente tiempo donde pueden consumir algo de alimentos es a las 8:45 o 9:00 horas, que es cuando termina su primera clase; por lo tanto de las 4:00 horas a las 9:00 horas son 5 horas en las que el alumno no ha probado un alimento sólido en lo que va de la mañana. Y esto no acaba ahí, los alumnos pueden ser afectados severamente en el desempeño académico debido a la mala alimentación que están llevando día con día. En cuanto a lo que el CCH Vallejo ofrece ya sea en la cafetería y lugares exteriores donde venden los alimentos que los jóvenes consumen a diario, algunos no aportan los nutrimentos necesarios para poder tener un aprovechamiento escolar adecuado. Lo que se debe de mejorar en la cafetería y en los otros puestos son los tipos de alimentos que se ofrecen; aunque algunos sí llegan a ser saludables, otros no lo son. La Sociología de la Alimentación nos ayuda a entender el problema de la comida entre los estudiantes; esta situación es una amenaza de la que los directivos se deben de percatar, y darle una solución. Los alumnos tienen que concientizarse más sobre la alimentación que llevan y por qué la llevan, cambiar sus actitudes de nutrición para poder tener mejores resultados en la escuela.
 

 

Conclusión

La Sociología de la Alimentación nos ayuda entender el problema a esta edad, y a buscar soluciones. Apreciamos algo realmente triste y desalentador: la mayoría de nuestros compañeros no se alimenta bien (por lo menos en la mañana), lo cual afecta a su rendimiento escolar. ¿Será acaso que los alumnos obtendrían mejores calificaciones si se alimentan mejor y a tiempo?

Por nuestra parte, pensamos que una buena solución sería dejar un día antes preparado algo para llevarse a la escuela o para consumirlo antes de salir, ahorrando tiempo al limitarse a calentar y consumir. Esto para bajar los altos índices de alumnos que salen sin alimentos de sus casas, ni siquiera salen con un refrigerio para consumir en el trayecto o en su defecto, en espacios de tiempo que se tengan en el plantel. Otra opción sería escoger bien lo que se compra en el Colegio, cerciorándose que proporcionen nutrimentos necesarios. Pero esto se resume en falta de educación alimenticia, desinterés por parte de los directivos y falta de razonamiento.

Con la ayuda de la Sociología de la Alimentación se ha pretendido aproximar este campo al entorno educativo del CCH Vallejo, y poner de relevancia la situación alimenticia que llevan muchos estudiantes en el plantel. Asimismo, con el sondeo se busca sentar las bases para llevar a cabo otras aplicaciones de la Sociología de la Alimentación en el plantel, con proyectos que puedan atender la problemática expuesta, o en dado caso formular propuestas o explicaciones acerca de todas las facetas del proceso de alimentación de los alumnos.
 
 
Fotografías: Alondra Chávez Poblano
 
Numero de edición: