Sociedad inglesa

Sociedad inglesa

Mentalidad emprendedora inglesa

Durante el siglo XVIII existieron en Inglaterra las condiciones y los estímulos para la invención y el desarrollo de las nuevas tecnologías, como el proceso de acumulación del capital, la existencia de instituciones financieras (Bolsa, bancas y compañías de acciones, entre otros), una monarquía constitucional con una importante participación burguesa en el parlamento, las inversiones del Estado en obras públicas, la investigación académica y el desarrollo de la ingeniería. Inglaterra era además la nación europea que había alcanzado un mayor desarrollo del comercio internacional gracias a su vasto imperio colonial, que tuvo como consecuencia la acumulación del capital.

La mentalidad emprendedora de la nobleza y la burguesía inglesa promovieron las inversiones de los excedentes de capital en la agricultura, las tecnologías y más tarde en la industria.

Proletarización y leyes de pobres

Mientras que las clases dominantes se enriquecieron, los sectores más desfavorecidos de la población se proletarizaron. Con el despojo de tierras por los cercamientos muchas familias cayeron en la pobreza; en 1536, Enrique VIII obligó a las Parroquias a socorrer a los pobres; en 1572, Isabel I creó un impuesto para los propietarios para dar asistencia; en 1601 se forma la ley de pobres como un instrumento de trabajo obligatorio y regulado localmente con fuertes correctores que castigaban la holgazanería. En 1622 se restringió la asistencia de los pobres propios de la Parroquia, con esto se pretendió aprovechar la fuerza de trabajo en la Parroquia de origen, restringir las fugas y fijar la residencia en un periodo donde no se exigía aún la movilidad de mano de obra que la revolución industrial requiere. En 1723 las "casas de pobres" se hicieron obligatorias y se negó asistencia al pobre que no entrase en ellas.

Casas de pobres

Cuando la Revolución Industrial empezaba a manifestarse se autorizó el prestar asistencia sin reclusión; aunque en ese mismo año las casas de pobres se convirtieron en centros de reclusión de los más pobres: por ejemplo, los niños huérfanos, quienes se convertirán en mano de obra infantil.

Iniciada la Revolución Industrial se demanda la movilización de la mano de obra, con ello se cuestiona la ley de 1622; no obstante la movilidad tardaría unas décadas. En 1795, con el sistema de asistencia se estableció una tabla de subsidios mínimos: cuando el salario de una familia no cubriese el mínimo de la subsistencia, correspondía a la beneficencia aportar el resto. También se fijó el mínimo de subsistencia a partir de una cantidad del pan que daba el valor del subsidio; el precio del pan marcó el subsidio para cada trabajador y cada miembro de su familia, con esto los empresarios buscaron reducir al máximo los salarios, puesto que la diferencia la pagarían los contribuyentes. No obstante el incremento que se dio a los impuestos no equivalió al incremento de los subsidios.

Mientras la industrialización fue incipiente se impidió la migración de los trabajadores a los distritos industriales; cuando la industria se consolidaba requería de más mano de obra, la migración rebasó la demanda; entonces los subsidios se limitaron a viejos e incapacitados; mientras a las familias pobres se les hacía trabajar en condiciones peores a las de los obreros.

Las Cortes de los Milagros eran los lugares de París en los que vivieron los pobres, los mendigos, los delincuentes y las prostitutas; a fines del siglo XVIII son demolidas las construcciones.

Te sugerimos realizar el Ejercicio 1 para que practiques lo aprendido.