Liberalismo económico

Liberalismo económico

Según Norberto Bobbio, el liberalismo es la teoría que establece la limitación del Estado en dos aspectos: limites a su poder y límites en sus funciones. El combate al absolutismo concretó la lucha contra el poder que el monarca concentraba en sus manos. Por otra parte, también era necesario restringir sus funciones, es decir, reducir su intromisión en los asuntos de los ciudadanos y la economía era, justamente, uno de los aspectos más importantes de la vida de la sociedad.

En este sentido, el liberalismo económico es una doctrina que propone limitar la intervención del Estado en la vida económica de una nación asignándole la función de asegurar el mantenimiento del orden y la vigilancia del cumplimiento de la ley, garantías para el funcionamiento de toda sociedad.

Los seguidores de la propuesta presentaron diversos grados de radicalismo, desde los que pretendían reducir al mínimo la participación estatal, hasta los moderados, que consideraban necesaria su intervención en ciertos aspectos. Para entender en qué medida era novedosa la idea de los liberales, habrá que recordar que el mercantilismo había operado desde el siglo XVI, y que el Estado ejercía un amplio control en la economía, básicamente para hacerse de recursos para financiar, entre otros gastos, la guerra de conquista y de expansión colonial. La creación de impuestos, el monopolio sobre ciertos productos, como la sal, y actividades como la acuñación de moneda estaban bajo el control estatal. Además, para regular la producción y el comercio estableció medidas de protección (aranceles) a las manufacturas locales y fomentó el comercio exterior para obtener metales preciosos.