Como ejemplo de los ciclos sedimentarios tenemos el del fósforo que se encuentra en los organismos formando los fosfolípidos de las membranas celulares, en el ATP, en los ácidos nucleicos, en los huesos, dientes, etc., y es asimilado como fosfato inorgánico (PO43-). El requerimiento de fósforo de los seres vivos es mayor que el que proporciona el medio, por lo tanto, es un factor limitante en los ecosistemas.
El ciclo del fósforo es de tipo sedimentario, ya que su principal reserva está en las rocas y los depósitos naturales de fosfato que se disuelven en el agua y son liberados al suelo por lixiviación y erosión, siendo captados por las raíces de las plantas y otros autótrofos que los incorporan a sus moléculas.
Las plantas (productores) son ingeridas por los herbívoros, éstos por los carnívoros y así sucesivamente, de esta manera los animales obtienen el fósforo que necesitan para sintetizar sus moléculas, huesos, conchas, etc., eliminando el exceso por la orina y las heces fecales.
Los fosfatos regresan al suelo al ser descompuestos los productos de excreción (orina y heces fecales) o por la acción de los descomponedores (bacterias y hongos) sobre los cadáveres y restos de los organismos que hacen que los iones fosfato queden disponibles para ser otra vez captados por los productores y se repita el ciclo. O bien, parte de los fosfatos pueden ser arrastrados por el agua de los ríos y llevados a los lagos profundos o al mar en donde se sedimentan y forman nuevas rocas; en este caso, los fosfatos están fuera de la disponibilidad de los organismos y tendrán que pasar millones de años, hasta que procesos geológicos expongan a las rocas a la intemperización.
Parte de los fosfatos que llegan al mar son captados por las algas para integrarlos a sus moléculas como fosfolípidos, ácidos nucleicos, etc.; el plancton ingiere a las algas y éstos a su vez son comidos por los consumidores mayores como peces, moluscos, etc. Finalmente, los restos y cadáveres de los organismos son degradados por los descomponedores y de esta manera se reintegran los fosfatos al medio, ya sea que se sedimenten o se inicie el ciclo.
Algunas aves marinas como el guanay, alcatraz, etc. se alimentan de peces e invertebrados acuáticos y depositan las heces fecales en tierra firme, donde se les conoce como guano y contiene grandes cantidades de fosfatos que pueden asimilar las plantas, por consiguiente, es utilizado como fertilizante natural y de esta manera regresa parte del fosfato del medio marino al medio terrestre. El hombre también interviene en el proceso ya que explota los depósitos naturales de fosfato y los usa como fertilizantes.