Para que la redacción sea fluida debemos tomar en cuenta la coherencia dentro de nuestro escrito. Esto requiere la comprensión de la información recabada para cada uno de los apartados especificados en el esquema de nuestro proyecto de investigación.
Cuando hablamos de coherencia nos referimos a que el texto esté organizado lógicamente y que de este modo pueda ser interpretado por quién lo lee.
Te sugerimos que la revisión del texto se realice cada vez que termines un capítulo de tu escrito. A continuación te presentamos unos cuestionamientos que podrías hacer frente a tu trabajo:
¿Qué relación tiene este capítulo con el anterior (en caso de que no sea el primero)?
¿Qué información adicional aporta?
¿Se mantiene el mismo referente a lo largo de los capítulos?
¿Existen contradicciones, lógica y argumentación de ideas propias y de otros autores?