Ganadería

La ganadería

Desde los primeros años de la conquista se introdujeron a la Nueva España diversas especies de ganados en cantidades reducidos debido a las dificultades de transporte, pero las buenas condiciones climáticas y topográficas permitieron el desarrollo de la ganadería. El ganado reportó amplios beneficios: el excremento como abono natural para los cultivos y una fuerza de carga y de transporte de la producción agrícola, en los reales de minas se utilizó como fuerza motriz, de carga y fuente básica de alimentación.

El problema principal de la ganadería fue la necesidad de grandes extensiones de tierra para el pastoreo, que provocó la destrucción de cultivos indígenas y la apropiación de grandes extensiones de tierra, muchas de ellas de las comunidades indígenas, formando grandes latifundios.

El ganado caballar fue el primero en hacerse presente como cabalgadura, para nobles y caciques, su rápida multiplicación redujo su precio y muchos pudieron disponer de caballos. Para 1524 se introdujeron las primeras cabezas de ganado porcino (cerdos), criados y comercializados casi exclusivamente por los indígenas, el uso de telas de abrigo y las costumbres europeas, hicieron que el ganado lanar u ovino ocupara un lugar destacado en la economía novohispana favoreciendo la aparición de obrajes de lana y confección de ropa. El ganado caprino (cabras) fue muy solicitado por la dieta de los españoles, se adaptó sin problemas a las tierras áridas del norte. El ganado vacuno (vacas) se extendió rápidamente, lo que significó una drástica disminución de los precios de la carne en las ciudades de México y Puebla.

La introducción de bestias de carga, asnos y mulas sustituyó el trabajo de carga de los tamemes, en forma gradual y lenta principalmente en las zonas mineras.

El rápido incremento del ganado provocó diferencias entre los españoles, para resolverlas se instituyó la Mesta, gremio de propietarios de estancias y de ganado (similar a la española), los “hermanos de la mesta”, como se llamó a los ganaderos pertenecientes a esta organización, tenían la obligación de asistir a las reuniones o consejos, y devolver el ganado ajeno.

Ahora realiza el ejercicio 1.